Frío, Dolor

Frío, Dolor

Aunque sienta el frío
no sabré lo que es el frío,
aunque sienta el dolor
no sabré distinguir su punzada
en mis lágrimas.
Todo me está condicionado.

Qué haré para sentir
el verdadero frío
y el purificador dolor,
caer en un profundo abismo
sin manos salvadoras
que me han detenido hasta hoy.
Soledad sálvame, senténciame.

Y aún allí no es certeza,
o más bien la única certeza
será que no sentiré el dolor
y el frío pasado por tu corazón.

Cómo obligarme, cómo
a pasar tu frío y tu dolor
y que recorra mi ser entero
y apague mi ilusión.

Cómo obligarme, cómo
si partiste con ellos
a tu propia paz
que tal vez no sea la mía,
ni mi frío, ni mi dolor.

Cómo armarme de valor
para sentir el frío metal
al costado de la sien,
de la costilla (como destajando a un animal)
y penetre hasta el más hondo frío
y se lleve al fin el dolor.






Tomando un café
al sentir el frío del viento.
05 de enero, 2015.
Subir a Inicio