Sentir

Sentir

Sentir tu piel tan suave
tan sensible que se pone
roja incandescente
al punto de cualquier contacto.

Y si vieras mis pupilas dilatadas
mis sentidos extasiados
que apenas el roce
de la fina pelusa que cubre tu cuerpo
es sentir la pequeña muerte
pulsando mi corazón
y la pequeña vida inundando mi corteza.

La caricia tan suave y tan dócil
que solo le queda ir sucumbiendo
ante los deseos inconfesables de la piel.


julio 2014

Aunque suene
a depravado
un día en el trole.
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